Deambulaba por el mundo
desesperado y sin amor,
con el único consuelo
de algún día encontrarme con vos,
pero el destino fue bueno
y me la fortuna me sonrió,
pues cuando estaba agotado
encontré tu corazón,
el cual me llevo a tus brazos
y me lleno de felicidad,
ahora alumbras mi vida
como si fueses el mismo sol,
cambiando mis penumbras
por un mundo de ilusión.
Te fuiste de mi lado
rompiendo mi corazón,
abriendo heridas del pasado
destrozando mi razón,
yo que siempre te he querido
yo que siempre te querré,
aunque no estés aquí conmigo
en mi mente te llevaré.
Que bonita es vida
pudiendo soñar contigo,
me levanto pretórico por la mañana
porque tu duermes conmigo,
todo es maravilloso
cuando estas a mi lado
pues vivo en el mundo mágico
del hombre enamorado.
La suave brisa de la mañana
me trae tu dulce aroma
con sabor dulce a miel,
trayéndome los recuerdos
de lo que vivimos ayer,
algo mágico e insuperable
que no puedo describir,
superando las espectativas
y las ganas de vivir.
El suave tacto de tus caricias,
tu sonrisa brillante como el sol,
tus labios sensuales y hermosos
que me hacen vivir un cuento,
donde tu eres la princesa
que reside en mi corazón,
alegrando cada día
con la mirada de tus ojos,
llenándome de alegría
solo con tu mirar,
pues tu nombre significa
eterna felicidad.
Lee más poemas cortos de amor:
645-646-647-648-649-650-651-652
desesperado y sin amor,
con el único consuelo
de algún día encontrarme con vos,
pero el destino fue bueno
y me la fortuna me sonrió,
pues cuando estaba agotado
encontré tu corazón,
el cual me llevo a tus brazos
y me lleno de felicidad,
ahora alumbras mi vida
como si fueses el mismo sol,
cambiando mis penumbras
por un mundo de ilusión.
Te fuiste de mi lado
rompiendo mi corazón,
abriendo heridas del pasado
destrozando mi razón,
yo que siempre te he querido
yo que siempre te querré,
aunque no estés aquí conmigo
en mi mente te llevaré.
Que bonita es vida
pudiendo soñar contigo,
me levanto pretórico por la mañana
porque tu duermes conmigo,
todo es maravilloso
cuando estas a mi lado
pues vivo en el mundo mágico
del hombre enamorado.
La suave brisa de la mañana
me trae tu dulce aroma
con sabor dulce a miel,
trayéndome los recuerdos
de lo que vivimos ayer,
algo mágico e insuperable
que no puedo describir,
superando las espectativas
y las ganas de vivir.
El suave tacto de tus caricias,
tu sonrisa brillante como el sol,
tus labios sensuales y hermosos
que me hacen vivir un cuento,
donde tu eres la princesa
que reside en mi corazón,
alegrando cada día
con la mirada de tus ojos,
llenándome de alegría
solo con tu mirar,
pues tu nombre significa
eterna felicidad.
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